Duerme 8 horas, es por tu salud

Por ello, nuestros hábitos pueden tener un impacto positivo o negativo en el sueño. En general, una mejor higiene del sueño incluye eliminar estimulantes como el alcohol, la nicotina y la cafeína antes de dormir.

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Adicionalmente debemos evitar las luces azules, ya que suprimen la liberación natural de melatonina causando insomnio.El deporte es un gran hábito, ya que el ejercicio estimula la liberación de la hormona del estrés: cortisol. Esta activa el mecanismo de alerta en el cerebro, por lo que hacer ejercicio regularmente mejorará la calidad de su sueño.

El ejercicio durante el día quema nuestra energía y agota sus reservas. Es por esto que necesitamos un sueño de calidad para recuperarla, restaurando también así tejidos corporales. Las teorías sugieren que la duración total del sueño y la cantidad de sueño profundo van de la mano con el gasto de energía. Esto resulta en nuestros cuerpos necesitando dormir aún más.

Es por ello que los atletas de alto rendimiento son muy estrictos con sus horas de dormir porque saben que esas horas son cruciales para que el cuerpo se recupere, combata la inflamación y reponga la energía celular. 

Así como los deportistas de alto rendimiento, también se encuentran los jugadores profesionales de videojuegos, ya que el sueño influye en el tiempo de reacción, la memoria de trabajo visual y su bienestar emocional. 

Por ello, al igual que otros atletas profesionales, los jugadores profesionales compiten constantemente, por lo tanto, están expuestos a altos niveles de estrés y realizar ejercicio puede ser un gran aliado del sueño para ellos.

Muchas personas le huyen a la actividad física en horario vespertino por el mito que dice que no podrás conciliar el sueño, pero los expertos de Colchones Emma señalan que es un error general decir que hacer ejercicio cerca de la hora de acostarse tiene un impacto negativo al dormir, debido a que realizar actividad física por la noche puede ayudar a alinear nuestro reloj interno con nuestro horario de sueño y facilitarlo debido a los cambios en la temperatura corporal central.

Claro que esto no se puede generalizar con todas las personas, por lo que, todos deben identificar sus propias preferencias y observar si el ejercicio por la noche promueve o inhibe su descanso.

“Hacer ejercicio ayuda a dormir mejor. La investigación actual muestra que la actividad física equilibra el sistema nervioso, responsable de si estamos tensos o relajados, pero también afecta su digestión, presión arterial, frecuencia cardíaca y respiratoria, temperatura corporal y respuestas emocionales. Por lo tanto, si quieres cuidarte a ti mismo y a tu sueño, debes hacer ejercicio regularmente" menciona Verena Senn, neurobióloga y experta en sueño para la firma de colchones Emma