Cáncer de mama, el desastre por desabasto y Covid

Sin embargo, hay quienes desde antes de la llegada del virus ya buscaban brindar mejores cuidados a quienes sufren este padecimiento: todo esto se ha visto mermado en los últimos dos años, lo que ha complicado la vida de los pacientes.

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Ante ello, la Fundación MILC (Médicos e Investigadores en la Lucha contra el Cáncer de Mama), junto con Salvati, promueven la detección temprana, el diagnóstico certero y tratamiento de la enfermedad, así como a una mejor atención clínica, educación de público en general y el impulso de una investigación multidisciplinaria de esta enfermedad en México.

No se nos olvide que tanto la pandemia, así como la transición del Seguro Popular al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) y el desabasto de medicinas, se conjugaron para ser los mayores obstáculos que vivieron los pacientes para no tener sus tratamientos en tiempo y forma.

De ahí que la Fundación MILC realizó en el presente año la encuesta “atención sin interrupción”, la cual arrojó que el 45 % de las entrevistadas han visto su tratamiento interrumpido este 2021.

Asimismo, cerca del 60% considera que la principal razón de la interrupción de su tratamiento se debe al desabasto de medicamentos y el 47% a la desaparición del Seguro Popular.

En tanto, el 15.1% considera que fue por causa del Covid-19 el no poder continuar con su medicamento, un número menor al de 2020, cuando 38% daba prioridad a esta razón. 

La falta de medicinas en el país ya sea por la nula compra o problemas de logística para repartirlas, ha sido un referente durante la pandemia y los enfermos de cáncer lo han hecho notar.

Ante ello, MILC ayudar con información a pacientes. Se trata de una campaña de videos, de material educativo, de infográficos, donde les dice cuáles son los pasos, qué es lo que tienen qué hacer para llegar al instituto correcto y se les brinde atención, así como medicamentos.

Debemos reconocer que el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Insabi cuentan con tratamientos innovadores para el tratamiento de cáncer de mama, sin embargo, aún falta organización en la distribución de los mismos. Esta situación sucede de igual manera con aquellos medicamentos pertenecientes al cuadro básico. Es decir, persiste un desabasto tanto de medicinas de innovación como aquellas pertenecientes al catálogo base.

No obstante, y a pesar de todo, hay que decir que una paciente adscrita al IMSS puede consultar con el médico de su clínica u hospital asignado, cuál es la posibilidad de que le sea prescrito alguno de los tratamientos innovadores para cáncer de mama en etapa avanzada.

El punto central de esta problemática es que el paciente de un oncólogo es un paciente para siempre, ya que se crea un vínculo, confianza y comunicación empática, mismos que se utilizan para motivar a que continúe con su tratamiento. Es ahí donde la vida cambia.

El auto es cofundadora y vicepresidenta de MILC.