Tour gastronómico por 5 Pueblos Mágicos

Visitar un Pueblo Mágico es la ocasión perfecta para adentrarse a la historia y las tradiciones mexicanas, así como para probar las delicias de la cocina local. Para conmemorar este día, la agencia de viajes en línea Expedia recomienda seis destinos únicos por su cultura y su gastronomía que, sin duda, pueden ser la fuente de inspiración para un viaje por México.

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Tequisquiapana, queso y vino

¿Quién no disfruta el queso y el vino? Tequisquiapan, uno de los seis Pueblos Mágicos de Querétaro, es una parada obligada para las personas que aman esta combinación. Desde luego, sus calles coloridas y sus aguas termales son dos pretextos más para visitar "Tequis". Una de las mejores épocas para ir a este pueblito es durante la Feria del Queso y el Vino, un festival donde participan los viñedos locales. Por si esto fuera poco, Tequisquiapan también ofrece la oportunidad de volar en globo. Incluso hay quienes aseguran que las parejas se entregan tanto al romance que regresan a casa comprometidos (o al menos más enamorados).

Coatepec, Café

El estado de Veracruz es famoso por producir el mejor café de México y Coatepec es el sitio perfecto para los fans de esta bebida. Por su ubicación geográfica a las faldas del volcán Cofre de Perote, al igual que por su temperatura, Coatepec se considera como la capital mexicana del café. Además, este pueblito tiene una arquitectura hermosa y muchas tradiciones culturales que atraen a turistas de todas partes del país. Uno de los atractivos de este destino es la hacienda Pancho Nuevo, que, con más de 400 años de historia, es una parada obligatoria para adentrarse en el mundo del café. Hablando de haciendas, Coatepec es hogar de dos exhaciendas famosas: Hacienda de Orduña (conocida como La Ceiba Gráfica) y la Hacienda de Zimpizahua.

Valladolid, longaniza

Valladolid es uno de los destinos más famosos del sureste mexicano por su gran cantidad de atracciones turísticas. Este Pueblo Mágico yucateco cuenta con calles hermosas, museos, mercados, fuentes, parques, tiendas de artesanías y restaurantes. La belleza de los sitios naturales que le rodean es impresionante, como lo demuestran sus cenotes. En lo que respecta a la gastronomía, es imposible dejar del lado la longaniza de Valladolid, que se come asada o en huevos revueltos y taquitos. Otro platillo digno de reconocerse es el poc-chuc, un platillo típico de la península de Yucatán que consiste en carne de puerco asada y marinada con naranja agria, ajo y pimienta. Para probar esta delicia, una buena opción es “La tía de Cuncunul”, un restaurante a 20 minutos en auto del centro de la ciudad.

San Cristobal, chocolate

Por sus construcciones barrocas y su atmósfera impregnada de las culturas tzotzil y los tzeltal, descendientes de los mayas, San Cristóbal de las Casas es una ciudad para conocer a pie. Entre sus edificios destaca la Catedral de San Cristóbal Mártir, que fue construida hace cuatro siglos. Su vida nocturna, que es igual de interesante que su arquitectura, ofrece varias opciones de bares y restaurantes interesantes. Volviendo al punto, San Cristóbal es famosa por su chocolate. Cacao Nativa es una cafetería local con delicias como trufas, bombones y barras de arroz con chocolate como las estrellas de su menú.

Dolores Hidalgo, nieves

Vayamos directo a la gastronomía. Dolores Hidalgo es famosa por sus nieves de muchos sabores, como aguacate, pétalos de rosa, cerveza e incluso camarón. Con tanta variedad, es posible estar todo el fin de semana probando tantas nieves como sea posible; no obstante, Dolores Hidalgo es más que eso. Cuna de la Independencia, este Pueblo Mágico tiene museos, restaurantes y cantinas que valen la pena visitar. Una curiosidad de Dolores Hidalgo es que aquí nació José Alfredo Jiménez, el famoso personaje que revolucionó la industria musical de México.