Mes rosa, ni una más

De acuerdo con el Global Cancer Observatory (GCO) es la neoplasia más común en México con más de 27,200 nuevos casos anuales.

Está relacionado con mutaciones genéticas, el inicio temprano de la menstruación, la aparición tardía de la menopausia, el uso prolongado de anticonceptivos orales, primer embarazo en edad madura, acortamiento de la lactancia materna y no tener hijos. También influye el consumo de alcohol, sobrepeso, la obesidad y el sedentarismo.

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“Este mes es importante recordar que muchas muertes por esta neoplasia pueden ser evitables mediante la detección, tamizaje y diagnóstico temprano. Estas medidas mejoran las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes, disminuyendo el costo y la complejidad del tratamiento”, indicó el Dr. Jorge García Alemán, líder de asuntos científicos de Becton Dickinson (BD).

En este sentido, el experto en anatomía patológica recordó que si bien la mastografía sigue siendo referencia para la detección y que la biopsia quirúrgica ha sido el estándar de oro para el diagnóstico preciso; hay otras técnicas mínimamente invasivas que ofrecen numerosas ventajas.

Un ejemplo son los dispositivos médicos para la toma de biopsia de mama de mínima invasión asistida al vacío, que a partir de una consola operada mediante una pantalla táctil y accesorios controladores de mano y pedal facilitan la toma de muestra guiada por ultrasonido, estereotaxia y/o resonancia magnética.

“Es lo más innovador en toma de biopsia de mama. Con una sola punción permite extraer múltiples muestras de tejido, administrar anestesia, enjuague de muestras con solución salina y aplicaciones específicas para este tipo de cáncer”, añadió.

Esta tecnología ya está en uso en los principales hospitales del Sistema Nacional de Salud (SNS) como el Instituto Nacional de Cancerología (INCAN), el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición 'Salvador Zubirán', el Hospital 'Adolfo López Mateos', del ISSSTE; algunos hospitales del IMSS y gabinetes privados impulsando el mundo de la salud a favor de las mexicanas.

En esta misma línea México está a la vanguardia, pues muchos hospitales ya cuentan con dispositivos innovadores para el análisis de las biopsias, que a partir de un vial de citología de base liquida permite una clasificación celular más eficiente y la posibilidad de hacer estudios adicionales para determinar el tipo de cáncer. Esto permite un tratamiento más adecuado y conocer el pronóstico de la paciente.

“En México ya están operando poderosos dispositivos que permiten la caracterización y monitoreo de estas neoplasias. Se llaman citómetros de flujo y permiten caracterizar las células brindando información sobre el tamaño, la complejidad y la expresión de ciertos antígenos.

“Esto posibilita la diferenciación de células normales versus patológicas, lo cual es muy importante para clasificar, diagnosticar, pronosticar y monitorear el cáncer de mama. Estos equipos tienen un fuerte impacto dentro de la investigación clínica para contar con metodologías estandarizadas que permitirán el diagnóstico de este y muchos otros tipos de cáncer”, agregó el Dr. García Alemán.