La Organización Mundial de la Salud apoya la postura de lograr la inmunidad colectiva mediante la vacunación, no permitiendo que una enfermedad se continúe propagando en un grupo demográfico, ya que ello daría como resultado que se presentaran casos e incluso defunciones innecesarias.

Llevar una alimentación saludable, no consumir tabaco y evitar la exposición a agentes cancerígenos, puede contribuir a reducir el riesgo de presentar el cáncer de pulmón. Es importante que las personas conozcan algunos signos y síntomas, como tos persistente, dolor de pecho, dificultad para respirar, tos con sangre o dolor de huesos y cabeza.

De acuerdo con Pathfinder International, la pandemia de Covid-19 podría tener un impacto significativo en la capacidad de los sistemas de salud para brindar servicios de salud sexual y reproductiva, además de que las restricciones de circulación y el miedo de los usuarios de acudir a los centros de salud podrían afectar en el acceso a estos servicios.

La participación de las mujeres en el mercado laboral y su acceso a la atención de la salud, ha contribuido a disminuir la fecundidad observada en todo el mundo.

Durante 2020 en México se diagnosticaron 7,459 casos de VIH, de acuerdo con datos del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el sida. El VIH es un virus que se propaga a través de ciertos líquidos corporales y que ataca al sistema inmunológico, haciendo que cada vez le sea más difícil luchar contra enfermedades como algunos cánceres o infecciones oportunistas que se aprovechan de su debilitamiento.

El cáncer de vejiga comienza con mayor frecuencia en las células uroteliales que revisten el interior de la vejiga (órgano muscular y hueco que almacena la orina, ubicado en la parte inferior del abdomen).

Afecciones y tratamientos como cáncer, trasplante de órgano sólido y/o médula ósea, deficiencias genéticas en el sistema inmunitario y VIH, pueden debilitar el sistema inmunitario de una persona, convirtiéndola en inmunodeprimida.

Con al menos 70 mil muertes anuales en el mundo, y la posibilidad de alcanzar 10 millones para el 2050, la resistencia a los antibióticos (RAM) es señalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como uno de los desafíos más importantes a combatir en esta recién iniciada década.