Reforma laboral y el camino de los ODS
- Escrito por Nallely Arellano López
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Hace algunos años se introdujo el concepto de la triple cuenta de resultados, también conocida como las 3P (por sus siglas en inglés), en relación con Profit, People y Planet, a la par se ha ido construyendo también el de gestión sostenible de las empresas.
Esto implica la incorporación, cada vez más amplia, de buenas prácticas que impactan la generación de valor financiero, social y ambiental, para asegurar la posibilidad de una mejora en la calidad de vida de las presentes y futuras generaciones de seres humanos, y la viabilidad de las empresas y el empleo.
También puedes leer. Sustentabilidad o sostenibilidad, entender lo básico. https://revistafactorrh.com/opinion/item/6815-sustentabilidad-o-sostenibilidad-entender-lo-basico
Desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se ha estado hablando del papel tan importante que juegan los sindicatos para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), llamados antes Objetivos del Milenio. Y es que un sindicato puede ser el vehículo más poderoso de fortalecimiento del diálogo social, para de ahí lograr construir competitividad y desarrollo sostenible para todos.
En todo Latinoamérica y el resto del mundo, va a ser fundamental que el sindicalismo se convierta en un verdadero gremio de todos los trabajadores, iniciando desde la base hasta el nivel ejecutivo y directivo de cada organización, donde prevalezca en todo momento la sostenibilidad del trabajo, evitando el conflicto laboral y se cumplan, del mismo modo, los requerimientos ambientales.
Debemos redefinir de esta forma el diálogo social a través del sindicalismo sostenible, y una herramienta clave para lograrlo es la Reforma Laboral que entró en vigor recientemente, misma que constará de varias etapas que se irán consolidando con el paso del tiempo conforme los resultados obtenidos.
Las Empresas Socialmente Responsables y los sindicatos que transiten a la sostenibilidad, tendrán que estar en constante comunicación para poder llegar a acuerdos en beneficio de nuestra sociedad y el medio ambiente. Es un gran paso el que se está dando, pero si no se sabe a dónde nos dirigimos con todo esto o los intereses económicos resultan más importantes como siempre, los esfuerzos de algunos cuantos serán en vano.
El autor (a) es abogada con diplomado en legislación ambiental.
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