Evita los molestos granitos en la cara

Existen un sinfín de mitos alrededor de la piel grasa y de la aparición de imperfecciones; que si la comida, que si el chocolate, sin embargo, hay factores que afectan de forma directa nuestra piel, muchos de ellos invisibles ante los ojos y que generan alteraciones internas en nuestro cuerpo, entre ellas, el aumento de brotes.

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De acuerdo con la firma ASH Natural Concept, ocho de cada 10 adolescentes presentan un aumento significativo de espinillas y granos en cara, cuello, hombros, la parte superior de la espalda y el pecho; esto se debe a la alteración hormonal que existe conforme crecemos y su gravedad dependerá de qué acciones tomemos desde que aparece esta afección cutánea.

¿Cuáles son las primeros signos de alerta? Los granos aparecen cuando los poros se tapan gracias al sebo generado por las glándulas sebáceas; por lo general, estas siempre regulan la cantidad que producen, pero, al crecer y vivir un huracán hormonal conforme maduramos, éstas se estimulan y pueden volverse hiperactivas generando un exceso de sebo facial que en conjunto con las células muertas del día a día, se tapan los poros, la piel se hincha, se enrojece y comienzan los brotes sin control.

El calor es otro de los aliados de las imperfecciones, ya que gracias al sudor – y en estas épocas al uso del cubrebocas – generamos de forma automática un ambiente idóneo para la proliferación de bacterias. Para evitar la acumulación de grasa, sudor y partículas contaminantes que refuercen el taponamiento de poros, es elemental traer contigo una loción facial que te ayude a mantener limpio, hidratado y fresco tu rostro.

Tallando duro no vas a lograr que los brotes desaparezcan. Recuerda que mientras más talles más dañas tu piel, por lo que se recomienda aplicar de forma suave tus productos faciales como el shampoo y la loción facial, para aplicar esta última utiliza algodón y aplica con pequeños toques por toda la superficie de tu rostro.

Otro de los factores que pueden activar un brote de imperfecciones es el estrés y el no descansar correctamente. ¿Sabías que la falta de sueño puede alterar el mecanismo que produce regula la grasa en el cuerpo?

El tener tu piel deshidratada también es un tema de importancia, el usar productos inadecuados para tu tipo de piel puede resecarla y provocar que tus glándulas sebáceas produzcan más grasa de la necesaria, generando brotes.

Teniendo esto en cuenta, debes saber que el implementar una rutina diaria de cuidado facial te ayudará a prevenir brotes intensos e incluso a controlarlos si es que ya los tienes.