Dermatólogo, un aliado contra la Psoriasis

La psoriasis es un padecimiento dermatológico crónico no contagioso, pero controlable, que afecta a más de 125 millones de personas a nivel mundial. El dermatólogo es el profesional de la salud que, tras registrar la historia clínica del paciente y hacer un examen físico completo, puede confirmar el diagnóstico de psoriasis.

Aunque, en estricto sentido, todos los dermatólogos certificados están facultados para diagnosticar y atender la psoriasis, es recomendable consultar preferentemente a un dermatólogo enfocado al área clínica y, en caso de que sea posible, que cuente con experiencia en el tratamiento de pacientes con esta enfermedad.

Además de atacar la piel, la psoriasis es una afección sistémica que provoca gran deterioro en la calidad de vida de los pacientes, tanto física como psicológicamente, pues con frecuencia está asociada a artritis psoriásica, afecciones cardíacas y algunos tipos de cáncer, lo que conlleva a cuadros de depresión y ansiedad.

Por eso, a partir de una evaluación integral, el dermatólogo deberá encargarse de conocer las comorbilidades del paciente e involucrar directamente a otros especialistas, si la severidad de la enfermedad así lo amerita: en caso de síndrome metabólico, recurrir al médico internista o al endocrinólogo; en caso de artritis psoriásica, al reumatólogo; en caso de depresión, al psicólogo o al psiquiatra.

De acuerdo con el grado de severidad de la enfermedad y sus comorbilidades, el dermatólogo se encargará de elegir entre los diferentes tratamientos existentes para la psoriasis. En el caso de psoriasis leve existen tratamientos tópicos. En cuanto a psoriasis de moderada a severa hay disponibles terapias sistémicas convencionales o tratamientos biológicos.  En cualquier caso, es importante que el dermatólogo determine el tratamiento más adecuado para cada paciente.

Al día de hoy hay disponibles nuevos tratamientos biológicos para la atención de la psoriasis moderada a severa en adultos, que ofrecen resultados tales como una piel libre de lesiones en menos semanas de tratamiento y logran que se mantenga así, lo que conlleva una mejora significativa en la calidad de vida de los pacientes.