Salud financiera, por dónde empezar

Tener unas finanzas sanas son clave para tener un estilo de vida exitoso, es por eso que, establecer desde ahorita tus propósitos financieros para 2024 puede ser una muy buena forma para comenzar a cambiar la relación con tus finanzas con el objetivo de lograr tus metas y no terminar el año con un desastre económico que no te deje dormir.

Sabemos que todo esto puede parecer demasiado y muchas veces es difícil saber cómo o por dónde empezar, ¡pero no te preocupes! Aquí te contaremos cómo es que puedes delimitar estas metas para que este nuevo año esté lleno de éxitos en tu vida financiera y lleves una mejor organización.

Pasos para lograrlo

Analiza y define tus metas. Para poder iniciar necesitas saber perfectamente cuáles serán tus objetivos a lo largo del año. Realiza una lista con lo que quieres lograr a corto, mediano y largo plazo para que puedas partir con claridad e ir viendo la mejor manera para manejar tus finanzas.

Evalúa tus ingresos. Es importante que veas cuáles son tus ingresos netos y cuáles son tus gastos fijos, con el fin de que sepas cuánto dinero es lo que puedes destinar a tus ahorros para cumplir tus propósitos financieros. Esto te ayudará asignar tus recursos de manera ordenada para que así contribuyas poco a poco a la realización de tus metas financieras.

Prioriza los objetivos. Muchas veces tenemos muchos objetivos y tienes que ser consciente de que no todos se pueden alcanzar al mismo tiempo, por eso analiza cuáles son los más importantes, o los que quieres alcanzar pronto, para que los puedas ordenar y poco a poco vayas avanzando en cada uno de ellos. En este punto te recomendamos hacer una lista de tus objetivos a corto, mediano y largo plazo, pero ¿cómo saber a cuál darle prioridad y cuál requiere más tiempo? Te contamos a continuación:

Los objetivos a corto plazo son aquellos que quieres lograr dentro de un año o menos, algunos de estos pueden ser: reducir gastos hormiga, saldar el pago de alguna tarjeta, ahorrar para una compra en específica o crear un fondo de emergencia.

Después tenemos los objetivos a mediano plazo. Estos son los que queremos conseguir en un tiempo moderado, por ejemplo, de 1 a 2 años. Si bien no se requieren de años para lograrlos, sí se necesita un periodo más largo para poder ver el logro. Entre ellos pueden estar: liquidar el crédito de un coche, pagar un viaje, comprar objetos específicos con un precio más elevado, realizar una boda.

Establece tus tiempos. Una vez que clasificaste tus objetivos, es momento de que les pongas un plazo para cumplirlos. Al momento de que los establezcas debes tener muy en cuenta tu evaluación de ingresos que hiciste previamente para poner fechas realistas y alcanzables que no interfieran en tu día a día. Este paso te servirá para que mantengas un progreso constante y vayas viendo a lo largo del tiempo cómo has avanzado, qué has logrado y que, finalmente, cumplas tus metas en el tiempo preestablecido.