Por primera vez, millones de personas ahora pueden vivir en cualquier lugar. La plataforma de espacios compartidos y experiencias Airbnb ha sido testigo de ello, por tal razón, en su más reciente análisis encontró algunas estadísticas a nivel global que dan cuenta de cómo están cambiando las tendencias.

Con el Covid-19, el trabajo a distancia cobró un precio aún mayor para los padres, ya que los niños y niñas en edad escolar, así como los adolescentes, tuvieron que tomar sus clases en línea, demandando atención dentro de sus hogares.

Al proporcionarles esa flexibilidad sobre dónde, cuándo y con quién trabajar, el 55% de los empleados tiene alto rendimiento, frente al 36% que trabaja de 9 a 6 en oficina, esto de acuerdo con datos de Gartner y su estudio sobre el futuro del trabajo.

¿Qué tan preparadas están las empresas para ofrecer una opción de teletrabajo que se mantenga como práctica formal? Las actividades remotas llegaron de manera intempestiva, sin embargo, el curso del año pasado permitió la adopción de este esquema gracias a múltiples factores como el avance de la tecnología digital en muchos procesos laborales.

Ante el posible regreso a clases y la constante del home office durante el año y medio que ha durado la pandemia, algunos productos han pasado a ser de los más populares entre los mexicanos. Un análisis de Clearsale, empresa de soluciones antifraude, encontró los 10 predilectos de los mexicanos para estudiar o trabajar en casa.

La adopción del home office en un entorno donde no hay otra opción ubicó a las empresas y sus colaboradores entre la flexibilidad y el estrés, abriendo el debate sobre la importancia de desarrollar una cultura laboral de bienestar, con una visión más allá de sólo la salud física, coincidieron especialistas.

Para aquellos mercados que se enfrentan a una escasez de talento en puestos emergentes y competencias de alta demanda, como es el caso del área tecnológica y digital, conseguir los profesionales adecuados resulta un desafío real y creciente. 

En el último año, los cambios en las prácticas laborales han sido visibles: la pandemia ha hecho necesario que las empresas cambien a un modelo de trabajo remoto para mantener activas sus economías, y estas modificaciones también han tenido repercusión en las mujeres líderes de negocio y en los retos que enfrentan, sin embargo, con el apoyo de la tecnología han logrado construir entornos de trabajo flexibles, ágiles y colaborativos.