En el marco del Día Internacional para la Prevención del Suicidio (10 de septiembre), es crucial centrar la atención en el bienestar emocional de los colaboradores.

Si tus colaboradores presentan falta de compromiso con su empleo, desconexión emocional con la empresa, problemas de salud física y mental, adicciones, depresión, ansiedad y disminución de la productividad. Estás en problemas.

Según investigaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social, 75% de los mexicanos padece fatiga por estrés laboral, números que superan a países como China y Estados Unidos. Por lo cual, es importante analizar la relación entre el estrés crónico y las enfermedades cardiovasculares.

Frente al Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, que cada año se conmemora el 13 de enero, y de cara al llamado “Blue Monday”, considerado como el día más triste del año, que este 2023 ocurrirá el 16 del mes en curso, WeWork hace un llamado para sensibilizar a las organizaciones sobre la importancia de priorizar la salud mental de sus colaboradores y reducir el estrés laboral.

Sabías que México se encuentra en el top de países con mayor estrés laboral del mundo. El 75% de los mexicanos la padece, superando a países como Estados Unidos y China, según un estudio realizado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

El cambio de formato y en los hábitos de trabajo, requiere de un espacio para adaptarse, tanto para los empleadores como para quienes laboran en las empresas. De ahí la importancia de poner atención a la salud mental, afirmó la Dra. Clelia García, Directora del área Clínica de Terapify. 

El estrés laboral podría convertirse en la pandemia de pandemias a que, de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), México ocupa el primer lugar a nivel mundial en esta condición.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) calcula que 11 por ciento del gasto destinado a la atención de discapacidades laborales está relacionado con trastornos mentales, lo que podría elevarse a 15 por ciento en años próximos, de ahí la importancia de poner en marcha programas sólidos que permitan atender esta realidad entre los trabajadores.