Kevin y su nueva vida
- Escrito por Redacción
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Con casi cinco años, Kevin Meléndez Soto ha vivido desde los dos meses de edad con convulsiones. A partir de los cuatro meses de vida, fue diagnosticado con Epilepsia Multifocal Refractaria.
A partir de ese momento, comenzó el vía crusis de su familia para suministrarle diversos tratamientos farmacológicos, sin embargo, la historia de ingresos hospitalarios tuvo un comienzo.
Sus padres lo llevaron al Hospital Infantil, al presentar convulsiones, y fue ahí cuando les dijeron lo que nadie quiere escuchar: la salud de Kevin era grave.
En esta primera visita, Kevin estuvo con respiradores artificiales, entubado y después de diez días fue dado de alta para regresar a casa con el tratamiento recomendado. Su salud siempre fue intermitente, comenta su madre. Al llegar a los seis meses de edad, nuevamente presentó convulsiones y su estado se agravó.
Esto es lo que sufre un niño con epilepsia y su familia. Gastos, traslados, convulsiones y las lesiones derivadas de ellas. La epilepsia refractaria, por definición, es resistente a los medicamentos, por lo que sus opciones de tratamiento son muy limitadas.
En este tipo de epilepsia, las crisis son muy frecuentes y limitan al paciente en su desarrollo mental y físico. Finalmente, los padres de Kevin decidieron probar con el aceite de cannabidiol (CBD) y han referido una disminución en la frecuencia de las convulsiones.
La familia consiguió el producto mediante la fundación Por Grace, y actualmente lo hacen gracias a un programa de la Secretaría de Salud del Estado de México.
Desde febrero de 2017 y hasta la fecha, la Comisión Federal de Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepis), ha otorgado cientos de permisos para importar productos derivados de cáñamo y con altas concentraciones de cannabidiol (CBD).
HempMeds México fue la primera compañía aprobada, para distribuir un producto que, por su composición, cumple con las regulaciones nacionales, al no contar con rastros de elementos psicoactivos.
“Kevin convulsionaba de 10 hasta 15 veces en un día, y desde hace como dos meses y medio, dos veces en un día. Tardé 15 días en conseguir el aceite y con el gobernador una semana.
“Antes, mi hijo estaba más adormilado, se le olvidaba todo. Ahora está más activo y retiene más las cosas. Si tienen la oportunidad de probar el aceite, que lo usen, a mí me ha funcionado mucho”, dijo la madre de Kevin.