Linfedema: un reto preventivo frente al cáncer de mama
- Escrito por Redacción
- Publicado en Bienestar 24 horas
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En la actualidad el cáncer de mama se ha convertido en una de las enfermedades más frecuentes en las mujeres del país, en algunos casos, las pacientes que lo desarrollan llegan a presentar linfedema, afección ocasionada por cirugías, quimio y radioterapias que sirven para combatir el cáncer.
El sistema linfático se encuentra, en mayoría, en la piel. La linfa (líquido que transporta este sistema) está formada por plasma, glóbulos blancos que son parte de nuestro sistema de defensas y de grandes moléculas de proteínas que sólo pueden ser extraídas por los vasos linfáticos. El linfedema es la hinchazón del brazo producida por una acumulación de linfa en los espacios que hay en los espacios entre células, provocada por una falla en la capacidad de transporte del sistema linfático a causa de la extracción ganglionar.
Existen dos tipos de linfedema: el primario, ocasionado por falla en los genes, se puede presentar a cualquier edad; el secundario, se desarrolla por traumatismos e infecciones. Éste último también puede presentarse en pacientes diagnosticadas con cáncer de mama o en aquellos que se someten a cirugía y radioterapia. Bajo este contexto, el linfedema puede presentarse desde el post operatorio hasta años después, presentando como síntomas dolor, disminución de la movilización, fibrosis, infecciones de difícil control como erisipelas y celulitis, deformidad, afección a la autoestima e imagen, incapacidad, entre otras complicaciones.
Terapias y cuidados especiales para combatir la enfermedad
La prevención es lo más importante además de sencilla. Ésta incluye el uso de una manga compresiva de 20-30 milímetros de mercurio de compresión y realizar una serie de ejercicios recomendados por los terapeutas calificados.
El tratamiento para linfedema lo debe realizar un terapeuta certificado. Es una terapia descongestiva compleja, la cual se realiza por una hora todos los días hasta que disminuya de tamaño la hinchazón. Ésta consta de cuatro pasos: cuidado de la piel y uñas, ejercicios específicos para cada paciente, un drenaje linfático manual -que no es masaje, sino el dirigir muy suavemente con las manos el líquido linfático hacia vías alternas de drenaje para descongestionar el brazo hinchado-, y el uso de varias vendas de corta elasticidad.
"Lo ideal es que antes de la cirugía, el terapeuta especializado tome medidas de las extremidades superiores en un estado normal, para después controlar la hinchazón del brazo con la instalación de una manga preventiva", comenta Eugenia Ramos, Presidenta de la Asociación Linfática de México A.C.
Aunque usar una prenda durante todo el día puede resultar desafiante para las pacientes, cuando ésta es cómoda, hecha a la medida y con los grados de compresión idóneos y dictaminados por el terapeuta, se puede llegar a olvidar que está usando una. La ventaja única que ofrecen estas mangas como lo son las Jobst Elvarex, es que su tejido de punto permite al músculo continuar con el drenaje linfático cuando está en reposo, lo que favorece la liberación de líquido. Incluso, el algodón que contienen, permite retener la humedad que se desprende por la transpiración de la piel, por lo que en el caso de las pieles sensibles, ayuda a evitar irritaciones y otras molestias.
"Sin duda el cáncer de mama es una enfermedad que cambia la vida de las pacientes. No obstante, estas mujeres luchan por enfrentar de manera positiva cada uno de los tratamientos. Lo más importante es resaltar que existen soluciones y esperanzas ante el linfedema. La cultura de prevención es fundamental para que el miembro sea funcional y operativo, aún con la ayuda de una manga de compresión", agrega la experta de la Asociación Linfática de México.